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EL SOL, LA FUENTE DE ENERGÍA MÁS ABUNDANTE DEL PLANETA

Por: Pablo Ramírez | Greenpeace

El sol es la fuente de energía más abundante en el planeta tierra y es el factor que ha permitido la vida como la conocemos y que mantiene vivo al planeta. Se calcula que en dos días, el planeta recibe del sol una cantidad de energía equivalente a todas las reservas probadas de petróleo, gas y carbón, el equivalente a 60 veces el consumo humano anual de energía.  

Este recurso “prácticamente ilimitado” ha sido utilizado desde hace muchos años para diversos fines. El primer registro que se tiene del uso de la energía solar data del siglo 3 a.C. en los imperios Griego y Romano, donde se inventaron artefactos para poder utilizar la luz solar para generar fuego, pero fue hasta 1938 que Alexandre Edmond Becquerel descubriría el efecto fotovoltaico, es decir la transformación de luz solar directamente en energía eléctrica. En un principio la tecnología de celdas generaba muy poca electricidad, por lo que no era posible su utilización práctica, pero marcó un hito en las posibilidades de generar electricidad.

Mucho ha pasado desde ese momento, la tecnología ha avanzado para generar artefactos más eficientes y más accesibles, a tal punto que ahora mismo es más barato generar electricidad a través del sol que a través de casi cualquier fuente fósil. Estas son buenas noticias especialmente para países como México, donde existen zonas con un altísimo potencial fotovoltáico, como la zona norte del país, una de las regiones con el mayor potencial del mundo.

Variación global de la radiación solar

Mucho ha pasado también en términos de impactos ambientales, el cambio climático es ahora uno de las principales amenazas que pone en riesgo el equilibrio ecosistémico y la vida de cientos de miles de especies, incluida la nuestra, en el mundo. 

¿Esto cómo se relaciona?

El cambio climático es un fenómeno atmosférico ocasionado por las actividades humanas, principalmente para la generación de energía. Desde finales del siglo 19, la quema de combustibles fósiles como el carbón, el gas, el petróleo, etc. ha aumentado enormemente para el uso industrial y con ellas ha aumentado también la emisión de gases contaminantes que dañan la salud y que se acumulan en la atmósfera incrementando el llamado “efecto Invernadero” y con esto al calentamiento global. 

¿Dónde queda la energía solar?

Como ya vimos, la energía solar es ahora una realidad, sin embargo su uso aún sigue siendo muy bajo, particularmente en países altamente dependientes de los combustibles fósiles como México. De acuerdo con cifras oficiales, del 100% de electricidad que se genera en México, solo el 4.3% es solar.  ¿Por qué? Actualmente somos testigos/as de un cambio en el paradigma de la energía, seguir bajo el modelo fósil que nos ha traído al borde del colapso ambiental no es deseable pero tampoco es posible. Sin embargo, también vemos cómo existen muchas resistencias políticas y corporativas que siguen tratando de alargar la vida de los combustibles fósiles. A pesar de todos los avances que existen y de ejemplos de éxito por todo el mundo, todavía se sigue diciendo que no funcionan… 

La energía solar, a diferencia de los combustibles fósiles, no está concentrada en un solo yacimiento. Podría decirse que haciendo una analogía con el agua, el petróleo sería como un lago y la energía solar como la lluvia. Esto hace que su aprovechamiento y transporte sea más complejo que el del petróleo y demás combustibles fósiles, pero también presenta ventajas, la energía solar a diferencia de las tecnologías fósiles puede implementarse en pequeña escala en el lugar de consumo, cada vez es más común y más factible que personas y comunidades puedan producir su propia electricidad a través de fuentes solares, esto es un factor muy importante para tener energía limpia, segura y asequible en lugares donde ahora mismo no hay acceso a la electricidad.

Sunset in the Pacific
© Greenpeace

Otra de las razones es que, como todos/as sabemos, el sol sale y se pone, es decir que es una fuente de energía variable que se puede aprovechar por el día pero no por la noche, aunque existen diferentes formas para hacer frente a la puesta del sol, existen sistemas de almacenamiento que permite guardar el excedente de energía que se produce por el día y utilizarlo durante la noche, también existen sistemas híbridos que conjuntan diversas fuentes renovables que se cubren unas a otras cuando no están disponibles: sistemas solares, eólicos, microhidroeléctrica, biodigestores, etc.

Por último, a pesar de que generar electricidad a través del sol cada vez es más barato, la instalación de este tipo de sistemas todavía no está al alcance de todxs, sobre todo de las personas que más lo necesitan. 

En conclusión, la energía solar es una realidad y es una de las mejores alternativas que tenemos para combatir el cambio climático y la pobreza energética, lo que hace falta es desarrollar mecanismos para poder hacerla una realidad: fortalecer nuestro sistema eléctrico, integrar en las estrategias sistemas de almacenamiento; desarrollar estrategias ambiciosas de generación descentralizada en pequeña escala para que la gente y las comunidades, principalmente las que no tienen acceso a la electricidad, pueden producir su propia electricidad de forma limpia y asequible, implementando mecanismos de financiamiento que permitan el acceso a sectores de la población que actualmente no lo tienen.

Fuentes:

(1)  Camilo Arancibia Bulnes y Roberto Best y Brown. (Abril -Junio 2010). Energía del Sol. Ciencia, 61, 10-17.

(2)  Oviedo-Salazar, J.L., M.H. Badii, A. Guillen & O. Lugo Serrato. (2015). Historia y Uso de Energías Renovables. San Nicolás de los Garza, N.L., México: UANL.

(3)  Beatriz Olivera Villa . (2020). EL CAMINO DE MÉXICO HACIA LA JUSTICIA ENERGÉTICA. CDMX: Greenpeace México.

(4) https://climate.selectra.com/es/que-es/efecto-invernadero#:~:text=Los%20gases%20de%20efecto%20invernadero,-Los%20Gases%20de&text=Absorben%20algunos%20de%20los%20rayos,principal%20causa%20del%20efecto%20invernadero.

(5)  PRODESEN 2022-2036, SENER, 2022.