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10 ESPECIES MEXICANAS EN PELIGRO DE EXTINCIÓN | GREENPEACE MÉXICO

Animales en peligro de extinción que no queremos que estén en nuestra ofrenda en el futuro.

Por: Jocelyn Soto

Estos días que celebramos a las y los muertos en México, queremos aprovechar para recordar a los animales que han sido amenazados por la actividad humana y que ahora sus especies permanecen catalogadas en peligro de extinción. No queremos llegar a 2045 con estas ni ninguna otra especie en peligro de extinción, desaparecidas. ¡Actúa por el planeta!

De acuerdo con información investigada por Centro para la Diversidad Biológica en el texto “Las 10 Especies Mexicanas Más Icónicas en Peligro”, estás son 10 especies mexicanas en peligro de extinción:

  1. Vaquita marina (Phocoena sinus)

Esta especie endémica del Golfo de California es el cetáceo de mayor peligro de extinción en el mundo. Las vaquitas son las más pequeñas de las siete marsopas conocidas. Las hembras crecen hasta 140 cm (4.6 pies) de largo, mientras que los machos sonun poco más pequeños, hasta 135 cm (4.4 pies). 

En 2018 se estimaba que la especie podría extinguirse en el 2021 ya que entonces quedaban menos de 30 vaquitas en el planeta. Sus mayores amenazas son  la captura incidental (o enredo y el ahogamiento) en redes de enmalle usadas para la pesca ilegal de peces y camarones. 

Ilustración de vaquita marina© Marcelo Otero
© Marcelo Otero
  1. Tortuga laúd (Dermochelys coriacea)

Esta especie es tan antigua como los dinosaurios, es el reptil más pesado del planeta y la más grande de todas las tortugas vivientes, ya que crece hasta 2 metros de largo y pesando hasta 700 kg. Se puede distinguir fácilmente de otras tortugas marinas por la falta de un caparazón óseo o carapacho, además de que tiene una capacidad incomparable para regular la temperatura corporal y tolerar incluso las temperaturas extremas del círculo polar ártico.

La actividad humana amenaza a las tortugas laúd de muchas maneras. Por ejemplo, al confundir su comida de medusas con trozos de plástico transparente que andan a la deriva en el mar; además, sus huevos son colectados para el consumo humano; el desarrollo costero y el turismo irresponsable han perturbado y destruido sus playas de anidación; y las luces de la ciudad confunden a las tortugas bebés que se mueven hacia las luces en lugar de hacia el mar. Las tortugas laúd también son afectadas por colisión con barcos y pueden ahogarse en la captura incidental en redes de enmalle de pesca.

¡Protege los océanos del mundo!

  1. Lobo mexicano (Canis lupus baileyi)

Ésta es la subespecie más pequeña de lobo gris en América del Norte. Es también uno de los mamíferos más raros y en mayor en peligro de extinción en el continente, con sólo pocas docenas sobreviviendo en vida silvestre después de un programa de reintroducción.

Los lobos grises mexicanos fueron exterminados en la naturaleza en la década de 1970 como resultado de las campañas de erradicación dirigidas por los gobiernos de EE.UU. y México, y en respuesta a la depredación de ganado. Ahora que ambos gobiernos tienen programas para reintroducir y repoblar al lobo gris mexicano, la caza, la intoxicación y pérdida de hábitat permanecen como amenaza. De acuerdo con la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp), para 2018 sólo quedaban 31 lobos grises mexicanos en la naturaleza.

  1. Ajolote mexicano (Ambystoma mexicanum

El ajolote mexicano históricamente vivió en los lagos de Texcoco, Xochimilco y Chalco, en la Ciudad de México. Sin embargo, el ajolote ahora sólo se encuentra en los canales y humedales de Xochimilco. El ajolote también se utilizó en remedios populares que supuestamente podrían tratar enfermedades respiratorias como el asma y la bronquitis. 

Con tantos supuestos beneficios atribuidos al ajolote, sufrió una sobreexplotación sustancial, además de que el drenaje de la tierra, la contaminación del agua y la pérdida de hábitat causada por el crecimiento de la Ciudad de México amenazan su vida. El vertimiento de aguas residuales ha contaminado gravemente lo que queda de lagos nativos de los ajolotes. En 1996, la densidad de población de la especie se estimó en 1,000 ajolotes por kilómetro cuadrado; pero en 2014, sólo 36 ajolotes se calcularon para la misma zona.

¡Salvemos al ajolote!

Salvemos al ajolote
© Greenpeace
  1. Guacamaya roja (Ara macao)

En México, la guacamaya roja ha sido completamente exterminada en los estados de Tamaulipas, Veracruz, Oaxaca, Tabasco y Campeche. Actualmente, sólo hay dos poblaciones conocidas que habitan en menos del 5 por ciento del territorio mexicano. Estas poblaciones se encuentran en la selva Lacandona, en el lado oriental de Chiapas y en Los Chimalapas, Oaxaca.

La tala indiscriminada, la caza ilegal, el robo de los polluelos – sólo 1 de cada 10 pájaros nacidos sobrevive a la edad adulta en la naturaleza -y el tráfico de animales han puesto esta ave en la lista de especies en peligro de extinción. 

  1. Mariposa monarca (Danaus plexippus)

En 2017, la población de mariposas monarca disminuyó un 27 por ciento respecto al año anterior, y más de un 80 por ciento comparado con estimados a mediados de la década de 1990.

Esta dramática disminución ha sido en gran parte el resultado de la siembra generalizada de cultivos genéticamente modificados. La gran mayoría de maíz y soja de Estados Unidos están diseñados genéticamente para resistir el herbicida Roundup de Monsanto, que tiene como principal ingrediente activo el glifosato, un potente asesino de algodoncillo, único alimento de la oruga monarca. El aumento en el uso de Roundup y otros herbicidas con el mismo ingrediente activo (glifosato) en cultivos “Roundup Ready” ha eliminado virtualmente las plantas de algodoncillo en campos de maíz y soja del Medio Oeste de los EEUU.

© Dave Taylor / Greenpeace
  1. Coral cuerno de alce (Acropora palmata)

Esta especie habita en aguas poco profundas y las colonias vivas exhiben una coloración amarillo, marrón o dorado y proporcionan refugio a una gran variedad de especies que interactúan y forman un complejo ecosistema. 

El coral cuerno de alce fue una de las especies dominantes en arrecifes someros del Caribe, pero ha disminuido drásticamente por el cambio climático. El calentamiento global ha aumentado la temperatura media del océano, y esta especie es muy sensible a incrementos de temperatura. Además, las enfermedades en corales han aumentado significativamente en las últimas décadas, matando al cuerno de alce y otros corales que forman arrecifes, posiblemente por el deterioro de la calidad del agua por diversos contaminantes.

  1. Pepino de mar (Isostichopus fuscus)

Esta especie vive en los arrecifes rocosos, arenosos y poco profundos a lo largo del Pacífico tropical oriental, desde el norte del Golfo de California hasta Ecuador, incluyendo las Islas Galápagos. Es una especie de larga vida, de crecimiento lento que puede alcanzar 28 cm de longitud y pesar 960 gramos. Los pepinos de mar marrones son más activos durante la noche y no tienen depredadores naturales como adultos.

A pesar de su apariencia, los pepinos de mar se capturan y se comen. Sus cuerpos enteros se pueden comer crudos o hervidos. Sin embargo, el producto más importante es la pared del cuerpo deshidratado, que se conoce como “bêche-de-mer” o “trepang”. En el mundo, el crecimiento de la demanda por esta y otras especies de pepino de mar representa un riesgo de sobreexplotación para todas las poblaciones de pepino de mar.

El estado de la población es actualmente desconocido, y a pesar de los signos de sobreexplotación y su prohibición para pesca comercial, la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) ha continuado con la emisión de permisos cada año, permitiendo la captura de decenas de miles de pepinos de mar, esencialmente estableciendo cuotas de uso de “evaluaciones de la población como proyectos de conservación” como disfraz para la explotación comercial.

  1. Orquídea monja blanca (Lycaste skinnerfi)

De las 30,000 especies de orquídeas identificadas en el mundo, 1,200 se encuentran en México y más de 200 de estas especies están actualmente en peligro de extinción. Más de la mitad de las orquídeas de México crecen en los bosques de niebla, un ecosistema que cubre sólo el 1 por ciento de la nación.

El hábitat de la orquídea se ha restringido intensamente por las plantaciones de café, el cultivo de arroz y frijoles, y el desarrollo urbano. Actualmente, la especie sólo se encuentra en laderas boscosas con pendientes inaccesibles. Se desconoce el estado actual de la especie en México. Actualmente, la mayor parte de la diversidad genética de la especie se mantiene en colecciones privadas o invernaderos.

  1. Jaguar (Panthera onca)

Conocido como “Océlotl” en náhuatl y “balam” en maya, el jaguar ha sido asociado en las diversas culturas de México con el valor, poder, la noche, el inframundo, la fertilidad de la tierra y la muerte.

Como depredadores, los jaguares controlan las densidades poblacionales de sus presas, por lo tanto la desaparición de jaguares puede alterar ecosistemas enteros. Sin embargo, la especie se enfrenta a numerosas amenazas: la pérdida y fragmentación de su hábitat, la agricultura y la ganadería, la caza, la reducción de sus presas (mamíferos, aves, reptiles y peces) y la expansión de los asentamientos humanos.

En México, más del 40 por ciento del hábitat del jaguar ha desaparecido, y ahora se limita a las zonas más apartadas y de difícil acceso en las costas del Pacífico y del Golfo, las sierras del este y del este y el sur-sureste de México. 

Jaguar y la deforestación en México
© Rodrigo Baléia / Greenpeace

Dos pilones: 

Estos animales no son endémicos de México pero sí se mantienen en peligro de extinción. 

  1. Oso polar (Ursus maritimus)

De acuerdo con el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF, por sus siglas en inglés), los osos polares están clasificados como mamíferos marinos porque pasan la mayor parte de su vida en el hielo marino del océano Ártico. Están en la parte superior de la cadena alimenticia y desempeñan un importante papel en la salud general del medio ambiente marino. Durante miles de años, han sido importantes para las culturas y las economías de las comunidades de la región. 

Debido a la continua y potencial pérdida de su hábitat, el hielo marino, como resultado del cambio climático, a partir de mayo de 2008, el oso polar fue considerado como especie amenazada en Estados Unidos, según la Ley de Especies en Peligro de Extinción.

  1. Mono Araña (Ateles geoffroyi)

De acuerdo con la Comisión Nacional de Áreas Protegidas, en el texto “Mono araña, el acróbata de la selva”, éste es un mamífero primate que posee largas extremidades y una gran agilidad para desplazarse y vivir entre las copas de los árboles. 

Vive en selvas ubicadas en el nivel del mar, hasta regiones boscosas. Tiene una función relevante en la dispersión de semillas de árboles de la selva. En la cultura maya y azteca, el mono estaba asociado a la belleza, el arte y la danza. Su principal amenaza es la destrucción de las selvas tropicales debido al incremento de las actividades agrícolas y ganaderas, así como los incendios forestales.  

Esta lista representa una alerta sobre la urgencia de proteger el planeta cuanto antes. Exijamos juntas y juntos más y mejores políticas que protejan nuestro medio ambiente y no que lo destruyan. No queremos llegar a 2045 con estas ni ninguna otra especie en peligro de extinción ¡Actúa por el planeta!